Patologías
Enfermedad mental
En la Edad Media al trastorno mental se le relacionaba con el demonio pues pensaban que la persona estaba poseída por espíritus malvados y que podía tener alguna relación deliberada con la brujería, así que el tratamiento podía ser la oración de liberación, la confesión penitencial para liberar el alma, e incluso la tortura o la hoguera para lograr la confesión de las personas que practicaban la brujería.
En el siglo XIX, los manicomios eran como cárceles, pues solo se disfrazaba la tortura como una curación, uno de los tantos casos fue en el hospital psiquiátrico Charenton en París, donde aplicaban como tratamiento, mantenerlos atados, sumergirlos en agua fría, golpes y sumergirles la cabeza en una bañera. Todo esto para apartar las ideas e ilusiones que ellos pudieran albergar.
En 1949, Antonio Egas Moniz, un premio Nobel en Medicina, practicaba la lobotomía, que consiste en retirar un trozo del cerebro en la parte frontal, pero en 1967 este tratamiento dejó de ser legal.
Paralelamente, en 1964 se llevó a cabo el proyecto MK-ULTRA, que buscaba controlar la mente y así borrar la memoria existente y reconstruir el pensamiento, algunos de los experimentos realizados eran la radiación, uso de psicotrópicos, inyección simultánea de barbitúricos y anfetaminas, y descargas eléctricas al cerebro. El único resultado de este experimento fue dejar a las personas involucradas con daño cerebral.